Controlar las masas es vital para eventos con cientos de espectadores ya que pueden ser muy peligrosos para otras personas y ellos mismos. El desastre de Hillsborough es un buen ejemplo de lo que sucederá si hay una falta de control de multitudes, en Sheffield los equipos de Nottingham y Liverpool estaban jugando, y las gradas estaban siendo llenadas con más de fans de lo permitido, y muchos de ellos fueron aplastados. En total 97 aficionados del Liverpool murieron debido al aplastamiento de otras personas. Si se hubiera utilizado el control de multitudes de forma correcta esto no hubiera ocurrido y desastres como este no pasarían, por eso el control de masas es vital.
Seguridad y protección
La seguridad es importante en cualquier caso para el espectador, para que un evento sea todo un éxito. Los administradores tienen que recibir constantemente capacitaciones para poder gestionar de forma segura el evento sin comprometer su seguridad y la de los demás, ya que esto daría lugar a una falta de control de multitudes y podría tener un efecto devastador en la seguridad de los asistentes que están tratando de controlar. Si la seguridad de la gente se ve comprometida la multitud puede comenzar a rebelarse contra los comisarios poniendo en riesgo la seguridad de todo el mundo, así como la seguridad del evento que se está cubriendo.
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